Hay varias alergias que afectan especialmente en verano, siendo las más comunes por el polen, la exposición al sol y las picaduras de insectos. La alergia estacional, producida en primavera y verano, se debe a que los niveles de polen suelen ser más elevados (por el mayor número de especies vegetales que expulsan su polen en esta época).
Una de las principales influencias sobre la polinización es el clima, y este varía según la zona geográfica. Si vas a viajar y desconoces los niveles de polen de tu destino son especialmente útiles los calendarios polínicos y los mapas de pólenes. Sin embargo, hay otras alergias que surgen por cambios en los hábitos en la época veraniega.
Un ejemplo, son los baños prolongados en la piscina que pueden agravar tus síntomas si sufres dermatitis atópica debido al cloro. Además, como en verano se frecuentan de forma más continua restaurantes, bares, etc. hay más posibilidades de sufrir reacciones alérgicas alimentarias, ya que se calcula que el 70% de estas suceden cuando comes fuera de casa.
También son frecuentes los ácaros en las viviendas alquiladas en verano o segundas residencias, presentes especialmente en zonas costeras y en viviendas que han estado cerradas durante mucho tiempo.
Por eso, para que estés preparado para este verano, te vamos a dar unos consejos para reducir en la máxima medida posible los efectos negativos de las alergias:
Lleva contigo un informe de tu medico con los detalles de tu alergia.
Usa protección solar cada vez que salgas de casa y no abuses de la exposición al sol.
Si tienes alergia al cloro, elige bañarte en el mar en vez de la piscina.
Si comes fuera de casa, infórmate antes de consumir los alimentos.
Sé precavido con los insectos.
Si vas a pasar tus vacaciones en una casa alquilada o una segunda residencia, limpia y desinfecta todo a fondo.
Mantén las ventanas cerradas y evitar salir a la calle entre las 5:00 y las 10:00, y entre las 19:00 y las 22:00 (las horas de mayor producción de polen).
No te tumbes en el césped y usa gafas de sol cada vez que salgas a la calle.
No secar la ropa al aire libre los días con mayor nivel de polen ya que este puede quedarse atrapado en ella.
