top of page

Jerez: cuidado de la piel en adultos

LA EDAD

Con la edad la piel se hace más fina, pierde grasa y aparecen manchas y arrugas.

La dermis además de grosor pierde elasticidad, volviéndose más sensible ante los agentes externos e incrementándose la presencia de enfermedades como el herpes zoster, o la queratosis, entre otras.


PROBLEMAS CUTÁNEOS

Fotoenvejecimiento. Producido por la exposición a las radiaciones ultravioletas del sol. Aparecen arrugas finas y toscas, pigmentación irregular, rugosidades, manchas parduzcas, coloración amarillenta y pequeños vasos sanguíneos superficiales.

Prurito o picor. Suele estar provocado por la sequedad de la piel (xerosis), por lo que se recomienda extremar la hidratación en las personas mayores.


Y TAMBIÉN…

Herpes zoster. Afecta a 4 de cada 10 ancianos y su duración y gravedad aumentan con la edad. Se trata de una infección de la piel provocada por un virus y se caracteriza por la aparición de una erupción rojiza en la piel, sobre la que aparecen unas vesículas que provocan dolor, que se secan y se transforman en costras.


O QUIZÁS…

Erupciones cutáneas. Es otro de los problemas más comunes en la piel de los/as ancianos/as, y son inducidas por medicamentos, el acné rosácea, las úlceras venosas, etc.

Tumores benignos (especialmente la queratosis o verruga seborréica), lesiones pre-malignas de la piel, melanoma y tumores malignos son a grandes rasgos las complicaciones más frecuentes en la piel de las personas mayores.


NUESTRO CONSEJO

Hidratación. La piel de las personas mayores necesita un extra de hidratación ya que las necesidades de agua aumentan en la vejez. Se recomienda beber dos litros y medio diarios, aumentar la ingesta de frutas y verduras y emplear cremas hidratantes específicas. Es aconsejable asimismo evitar los ambientes secos, usando humidificadores en casa.

Protección solar. Factores de protección solar muy altos y evitar el sol en la medida de lo posible empleando gorros y ropa amplia de algodón y colores claros.


MÁS CONSEJOS

Higiene. Se recomienda emplear jabones muy suaves, ducharse y/o lavarse con agua templada, secando la piel con toques suaves con la toalla y aplicar la crema hidratante cuando la piel está todavía húmeda. También es recomendable el uso de exfoliantes elaborados con productos naturales aplicados mediante masajes suaves en cuerpo.



Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page